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Editorial 332

 


Identifica las metas de tu vida

 

Una meta es el objetivo, el punto final hacia el cual caminamos con la esperanza de alcanzar las cosas que soñamos. Los seres humanos tenemos muchas metas: dinero, salud, conocimiento, éxito, etc. El objetivo final de todas las metas es lograr el éxito, la paz, la libertad y la felicidad.


Existen muchos caminos que llevan a distintas partes. Lo importante es identificar el camino que conduce al éxito, a la libertad y a la felicidad. Muchas personas eligen mal el camino y luego se pierden en los vericuetos de la vida.


Para identificar las metas correctas es necesario tener criterios claros sobre el valor real de las cosas y sobre las conductas correctas, para no errar en la vida, lo cual supone conocer la verdad y el bien.


Como vivimos en una sociedad ignorante y mediocre, escasa en criterios y valores, resulta difícil identificar las metas correctas y los valores por los cuales vale la pena vivir y luchar; sin embargo, es la tarea más importante para elaborar el mapa de ruta que nos guíe en el camino. Nadie puede llegar a su destino sin un mapa de ruta.


Cómo identificar las metas correctas


Los seres humanos percibimos las cosas por analogía; es decir, percibimos lo que se relaciona con lo que conocemos, con lo que pensamos, con lo que somos; por esta razón, cada persona elige metas acordes con su filosofía de la vida, forma de ser, de acuerdo a sus intereses y a sus valores.
Podemos decir que, en cierto modo, cada persona tiene su suerte marcada.
Conociendo a las personas podemos saber con antelación por qué metas se decidirán y cómo les irá en la vida.

 

A la hora de definir las metas por las que queremos vivir y luchar, y, sabiendo que ellas son determinantes en la dirección de nuestra vida, y que pueden hacer la diferencia entre el éxito y el fracaso, necesitamos realizar un acto de reflexión profunda, ser honestos y tomar la decisión inquebrantable de avanzar en la dirección correcta, porque, una vez tomada la decisión, el cerebro se programa y comienza a trabajar en la dirección elegida.

 

Como la mayoría de las personas no están claras en la defición de sus metas, ni son consecuentes con sus decisiones, cambian constantemete de planes y viven a la deriva, en consecuencia, su vida es un caos.


Como la vida es cambio y evolución, necesitamos renovarnos constantemente y revisar el mapa de ruta. Además, las debilidades y las tentaciones de la vida, pueden alejarnos de nuestro destino sin que nos percatemos de ello, por lo que necesitamos estar alerta para rectificar a tiempo, pues, cuando las cosas adquieren dinámica, resulta difícil controlarlas.

 

Cómo saber si hemos elegido las metas correctas

 

El objetivo de las metas es satisfacer las necesidades de cada persona; por lo cual, cada persona elige sus metas de acuerdo a sus necesidades y nivel de evolución.

Existe una escala de necesidades humanas. Según Maslow, estas necesidades se ordenan jerárquicamente de acuerdo a su grado de fuerza y de prioridad
1. Necesidades biológicas.

2. Necesidad de seguridad.

3. Necesidad de aceptación.

4. Necesidad de estima y reconocimiento.

5. Necesidad de autorrealización o desarrollo.

 

Es responsabilidad de cada persona adulta encontrar la forma de satisfacer estas necesidades, para lo cual debe prever, planificar y tomar las decisiones correctas.


En la actualidad, debido a la competencia y a las necesidades creadas, los seres humanos se centran en metas de tipo económico y laboral, en las que invierten la mayor parte del tiempo, en detrimiento del desarrollo personal y de la vida afectiva, familiar, social y espiritual. Este error se paga muy caro, pues nada compensa la falta de desarrollo personal, el deterioro de la familia, de la autoestima y de la espiritualidad.

La mayoría de las personas sólo se dan cuenta de este error después de muchos años, cuando el mal ya está hecho y resulta imposible enmendar las cosas.


Existen muchas decisiones importantes de supervivencia, relacionadas con el trabajo, etc. Son decisiones ineludibles, pero, mientras no tomemos decisiones relacionadas con el propio desarrollo, jamás levantaremos cabeza.


Todas las personas buscan un lugar donde vivir en paz y ser felices, para ello trabajan  y ahorran. Se trata de una casa o de un apartamento, de algo material, lo cual es necesario, pero son pocas las personas que se esmeran por construir ese lugar interno que es el propio Yo.


Las personas pueden alcanzar muchas cosas: fama, riqueza y poder; todo esto es bueno y necesario, pero, quienes han alcanzado alto grado de desarrollo, nos dicen que no hay nada que se pueda comparar con el desarrollo del ser. El desarrollo del ser proporciona una conciencia superior, identidad, autoestima y plenitud.


En medio de la confusión social en que vivimos, todos, sin excepción, estamos buscando el camino hacia el encuentro de nuestro propio Yo.


"Busco, yo no sé que busco, creo que es un rostro que una vez perdí. Siento, siento una nostalgia
de algo que me falta desde que nací"

 

Unos buscan ese yo de forma consciente y otros por instinto. El camino es largo, "Pero, no importa si el camino es largo, cuando el destino es tu corazón"

 

 

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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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